Menos Peinetas

Menos Peinetas

lunes, 16 de abril de 2012

Buenas noches y,.. buena suerte.

  El próximo día 18 de Abril tendrá lugar el Pleno de Disolución de la Junta Central Fallera del ejercicio 2011- 12 en la sede del organismo rector de  las fallas de Valéncia.

  Mucho se ha hablado del ejercicio pasado, primero en el que Francisco Lledó ha dirigido el mismo, y lógicamente en un ente que aglutina a cerca de 100.000 personas, ha habido opiniones para todos los gustos.
  Siempre he gozado de entera libertad para exponer mi punto de vista sobre cualquier tema, eso es lo que tienen los blogs, pero lo que sí que tengo que agradecer es que cuando he criticado el funcionamiento de la Junta Central Fallera, nunca he recibido ni una llamada, ni un consejo de nadie, sobre lo moderado, equivocado o diferencias con lo por mi escrito. Es lo más sencillo del mundo el que alguien, desde “dentro” de una institución, intente moderar aquello que se considera crítica y opinión contraria a la línea oficial establecida. La opinión es libre y de cada uno, y no es nunca ni verdad ni mentira, es opinión.
  Volviendo al Pleno de Disolución de la Junta Central Fallera, quizás sea este el momento de hacer cuentas, de ver las luces y las sombras de un ejercicio que ha supuesto un cambio en la cabeza del ente y también como no, en las formas.
  D. Francisco Lledó llega a Junta Central Fallera después de las elecciones de Mayo de 2011, donde la Alcaldesa Rita Barberá le nombra Concejal de Ferias y Fiestas y Cultura Popular, en sustitución de Félix Crespo al que, después de durante 8 años estar al frente de la misma, le nombra para un nuevo cometido en el organigrama municipal.
  De entrada el Sr. Lledó, siempre desde mi punto de vista, parece querer hacerse con las riendas del organismo fallero con prontitud y rapidez, lo que le lleva a lanzarse a la piscina, quizás no siendo asesorado muy correctamente en algunos momentos, sin ver si ésta ya se había llenado suficientemente de agua. Amén de ello, y yo no pongo en duda el carácter dialogante que pueda tener el Sr. Lledó, en algunas ocasiones da la impresión que ve el hemiciclo en la Asamblea de Presidentes, como en cualquier debate municipal, donde su partido tiene esa mayoría absoluta que desde hace muchísimos años, le hace dirigir la ciudad. A eso me refiero cuando hablo de un posible mal asesoramiento hacia su persona. Casos como el nombramiento de determinado jurado el día de la Batalla de Flores, no es más que un ejemplo, como también lo puede ser el malentendido de la ofrenda.
  A estas alturas estoy más que convencido que ya sabe que al hemiciclo se llega con la Asamblea (no voy a decir que pactada) comentada con aquellas personas que van a ser protagonistas en la misma. Que aunque el hemiciclo es proclive a dar siempre la razón a la presidencia, hay determinados temas que suelen levantar ampollas entre los falleros, y que si a estos no se les da la posibilidad de expresarse y disentir, se corre el riesgo de salir con muy mala cara del mismo.
  Esa ha sido la única diferencia de un ejercicio como otro: La mano que mece la cuna. La crisis ya ha comenzado a socavar los cimientos de algunas comisiones falleras, y también de la Junta Central Fallera, y esto se tiene que notar. Aún así, seguimos viviendo en el paraíso idílico de la fiesta donde todo son sonrisas y las lágrimas sólo llegan cuando en la noche del 15 y del 16 los jurados “reparten suerte” entre las comisiones y ahí el Sr. Lledó, no tiene nada que ver.
  Bien es cierto que poco puede cambiar, cuando el Sr. Lledó prácticamente ha mantenido a la cúpula de la Junta Central Fallera, quien con sus pros y con sus contras, ha hecho talmente lo mismo que en ejercicios anteriores. Al que antes la Junta no le gustaba, sigue sin gustarle, y a quien le encantaba y aplaudía todos y cada uno de los actos de ésta, sigue actuando de palmero de sus hechos, y como no se puede contentar a todo el mundo… pues todos quedamos contentos y nos felicitamos del éxito conseguido.
   Hace un tiempo, corrió el rumor en todos (y digo bien en todos, no en uno si y en otro no) los mentideros, que este sería “el año de la revolución en Junta”. El Sr. Lledó este año iba a poner patas arriba el Casal de la Avenida de la Plata. Se hicieron quinielas, se dieron opiniones para todos los gustos, comenzaron a correr rumores, informaciones sesgadas e interesadas, que ponían al Sr. Lledo, que ríete tu de Robespierre y Danton. Qué verdad mas grande, aquello que el tiempo todo lo calma… que lo importante es sobrevivir a la primera ola del sunami, pues a la segunda ya se puede hasta nadar en ella.
  Que el tiempo del Secretario General estaba contado, era evidente y finalizó  justo unos días antes de fallas. La resolución de la Administración llegó y fue el punto y final a unos años de dedicación de Vicente Fayos al máximo organismo de la fiesta. Nada impide al Sr. Lledó el que siga contando con Fayos en la Junta, ahora bien, solo falta que éste quiera continuar prestando sus conocimientos en otro puesto de su organigrama.
  Todo el mundo sabe que yo no soy amigo del Sr. Fayos, aunque siempre lo he tratado como tal. Soy “conocido” de él (si puedes llamar amigo a aquel con quien has comidos sopas, no lo puedo hacer, porque solamente hemos cenado juntos una vez y éramos 400 mas…) y siempre he intentado desde la crítica, que conociera el sentir de aquellos que no piensan como él a la hora de realizar su trabajo. Mis críticas nunca han ido a la persona, solo hacia determinadas y puntuales actuaciones. No le gustó lo que le llamé un día (sin “animus injuriandi” sino más bien con “animus iocandi”) y desde ese momento, aunque nunca me negó la mano cuando yo le entregué la mía, uno sabe cuando no le resulta agradable a un tercero… Si en esto o en cualquier otra cosa, que sabes que a lo largo de nuestra larga andadura fallera, Vicente, te haya podido ofender o te he hecho sentir incómodo, lo lamento. Si me conoces un poco, aunque sea un poquito que creo que sí, sabes que nunca ha sido mi intención. Desde el fondo de mi corazón, te deseo una larga y tranquila vida fallera, pero sin sobresaltos, que ya hemos tenido los nuestros.
  El nuevo Secretario General es una gran persona. Amigo de sus amigos y  fallero de Pelayo, una falla centenaria de la que ha mamado nuestra locura desde pequeño como su padre y el resto de su familia. Tiene un montón de años acumulados en su gran Agrupación y conoce muy bien cuáles son los problemas de la fiesta. De él me ha dicho un viejo amigo común, que no nos pensemos que no tiene genio, que sí que lo tiene y que, aunque le cuesta muy mucho el enfadarse porque tiene un gran aguante, también lo sabe hacer… y le sale muy bien. Espero José Luis que nunca te enfades con quienes sólo quieren que ayudar, y recuerda que una de las formas de ayudar, es criticando lo que pensamos que no se hace bien, que nadie lo olvide.
  Un abrazo a todos los Delegados y Delegadas de Sector que este año dejaran de serlo y a los nuevos y nuevas, otro tan grande como el anterior. Sin vosotros mande quien mande, no podría hacer nada. Gracias por vuestro trabajo y dedicación. Sois lo mejor de la Junta Central Fallera, no me cabe la menor duda.
   ¿Qué pasará ahora? No me gustan las quinielas, porque nunca acierto más de 6. Con Unai...es lo que hay, y com siempre le pongo ganador al Valéncia, es difícil si no le pongo un triple. No sé lo que hará Paco Lledó, no sé si serán verdad aquellos cantos de sirena que hablaban de tantos cambios en la cúpula de Junta. No sé si las nuevas incorporaciones que se preparan, simplemente sustituirán en los cargos a las personas que hasta ahora venían ocupándolos o realmente supondrán un cambio en las formas y en el funcionamiento de la Junta, el tiempo lo dirá. Se ha llegado a tal automatización en el funcionamiento de ésta que los cambios son, en algunas cosas, impensables. No hay que tener miedo a ellos, tampoco a las personas, pero no me tengo por inmovilista, siempre me gusta cambiar y cuando lo hago y me equivoco, me encanta descubrir que mis amigos me avisan de mi error y me aconsejan sobre como no volver a cometerlo, porque Sr. Lledó, no lo olvide, los amigos están para esto, no están para aplaudir lo que hacemos siempre.

  Buena suerte Sr. Lledó, buena suerte Sr. Vaello y buena suerte a todos y cada uno de los miembros de Junta Central Fallera, pues vuestra suerte es la de las fallas, y si me permite un consejo, hable, hable mucho con todos aquellos que tengan algo que decirle, no crea que es una pérdida de tiempo, nunca lo es, de verdad.

  Felices Fallas del 2013 y que Dios y la Merkel nos cojan confesados…

Es mi opinión:

1 comentario:

  1. tu logotipo es de peinetas clasicas modelo 201 utilizalo sin probleas aunque nuestro lema es
    peinetas para todas
    julian campos

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